El aprendizaje de la autorregulación es una finalidad importante de la educación y una condición necesaria para hacer del alumno un participante activo del proceso de enseñanza y aprendizaje. La autorregulación favorece la implicación de los alumnos y alumnas en la tarea y, con ello la tarea del profesor, ya que le permite conocer, observar y valorar mejor las necesidades educativas y, en consecuencia, proporcionar las ayudas adecuadas, propias de una enseñanza de calidad. Todo ello contribuye a evitar el fracaso escolar y a desarrollar las habilidades necesarias para seguir aprendie…